Hemos leído con interés la Carta al Editor de Velilla Moliner et al. relacionada con nuestro artículo y agradecemos las matizaciones realizadas1.
A diferencia de los métodos diagnósticos que cuantifican la troponina I ultrasensible, los métodos que cuantifican la troponina T ultrasensible (TnT-us) permiten detectarla en torno al 35% de la población sana2. Sin discutir cómo se define la población sana, y si el percentil 99 debe variar en función de las características de la población estudiada3, este aspecto no ha empañado el valor de la TnT-us tanto para diagnosticar el evento coronario agudo como para excluirlo (dado su elevado valor predictivo negativo4). Además, como bien apuntan los autores, la TnT-us ha demostrado también valor pronóstico no solo en poblaciones afectadas de cardiopatía, sino también en poblaciones sanas.
El biomarcador ideal debe ser útil en el diagnóstico, el pronóstico y también los aspectos relacionados con el tratamiento. En este último apartado, la TnT-us aparece como marcador de la eficacia del tratamiento pautado5 en la insuficiencia cardiaca.
Los hallazgos del registro TUSARC (Troponina T UltraSensible en pacientes de muy Alto Riesgo Cardiovascular) y otros obligan a los clínicos a indagar en las causas de elevación de la TnT-us más allá de la isquémica. En este sentido, cobra importancia la asociación de la TnT-us elevada con la insuficiencia cardiaca y la fibrosis miocárdica6, pues orienta su papel como marcador de daño estructural reversible o irreversible.
FINANCIACIÓNRoche Diagnostis aportó los kits para la determinación de troponina, así como los controles tanto internos como externos.