Introducción y objetivo. La implantación de stents coronarios ha contribuido a mejorar el resultado angiográfico inicial, a disminuir la reestenosis tardía y a minimizar el problema de la oclusión aguda y subaguda. A pesar de ello, continúa sin resolverse completamente el problema de la reestenosis tardía. El objetivo del presente estudio fue identificar las variables clínicas, angiográficas y del procedimiento predictivas de reestenosis después de la implantación de un stent coronario con éxito. Material y métodos. Se analizaron retrospectivamente 202 lesiones, en 176 pacientes consecutivos a los que se les había implantado un stent coronario con éxito en nuestro hospital entre enero de 1995 y agosto de 1998. A todos ellos se les realizó un control angiográfico a los seis meses de la implantación del stent. Resultados. De las 202 lesiones evaluadas, 47 evolucionaron con reestenosis (23%) y 155 lesiones sin reestenosis. En el análisis multivariado las únicas variables que se mostraron como predictivas independientes de reestenosis fueron: estar recibiendo tratamiento hipolipemiante en el momento de realizar el procedimiento (OR: 0,3; IC: 0,1-0,8), implantar los stents a presiones > 10 atmósferas (OR: 0,4; IC: 0,2-0,9), implantar stents en vasos < 3,1 mm (OR: 2,2; IC: 1,1-4,5) y dejar una lesión residual post-stent > 30% (OR: 13; IC: 1,5- 120). Conclusiones. En relación con el fenómeno de reestenosis intra-stent, los únicos factores protectores, con significación estadística independiente, fueron: estar recibiendo tratamiento hipolipemiante en el momento de realizar el procedimiento e implantar stents a altas atmósferas, mientras que aparecieron como factores de riesgo: implantar stents en vasos < 3,1 mm y dejar una lesión residual significativa después del procedimiento.