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Varón de 43 años de edad, diagnosticado al nacer de coartación aórtica grave y operado en la infancia, que cursó favorablemente y creció con normalidad, sin insuficiencia cardiaca. Sin embargo, con 7 años de edad se le diagnosticó reestenosis de la coartación y estenosis subaórtica de membrana, de carácter leve. A la edad de 9 años, se intervino al paciente de la recoartación con resección del segmento recoartado y anastomosis terminoterminal. A los 11 años precisó una nueva intervención quirúrgica de la membrana subaórtica, cuya estenosis había progresado hasta hacerse grave. El paciente evolucionó bien, y abandonó las sucesivas revisiones hasta que, a los 43 años, una radiografía de tórax rutinaria mostró un aneurisma gigante en el arco aórtico. La figura 1 muestra la radiografía torácica simple y la tomografía computarizada antes de la intervención. Se encargó un stent recubierto «a medida» (135 mm de longitud × 20 mm de diámetro), que se implantó en la aorta tratando de excluir el aneurisma (figura 2A). Mediante perforación del tejido sintético desde la subclavia izquierda con guía metálica capturada en la aorta, se restableció el flujo hacia la subclavia implantándose un nuevo stent recubierto en el origen (8 × 34 mm; figura 2B). El aneurisma quedó parcialmente excluido y trombosado, pero persistía una pequeña fuga. Al año del implante, se sondó la cavidad residual, que se rellenó con coils y guías metálicas teflonadas, con lo que se consiguió la completa obliteración del aneurisma (figura 2C,D).
